Según IDC, si hace un par de años apenas almacenábamos un
5% del total de nuestros archivos en la nube, ahora ese dato llega al
24%.
Por eso, no es de extrañar que, según esta misma consultora, en 2014
la capacidad de almacenamiento en la nube vaya a superar los 7 EB
(exabyte). Para muchos negocios, ya sean particulares o empresariales,
la nube se ha convertido en algo obligatorio y que forma parte de su
infraestructura tecnológica. De hecho, los despliegues en estas nubes,
ya sean públicas o privadas, superarán en breve a los tradicionales
despliegues de centros de datos que tenían las empresas.
Puede decirse que la informática en la nube ha transformado la
entrega de servicios de tecnología y el ecosistema de los
suministradores el almacenamiento, tanto desde el punto de vista del
hardware como de software y servicios. Es uno de los sectores que más se
está viendo impactado por esta transformación.
El almacenamiento en la nube debe ofrecer una solución adecuada para
todo tipo de público, y puede darse en nubes privadas o públicas. Según
los datos de IDC, el gasto en soluciones cloud tiene un ritmo de
crecimiento anual del 23,5% hasta 2017 (lo que supone cinco veces más
que el resto de la industria de tecnología). Dentro de las inversiones
cloud, la categoría que más va a crecer va ser el de plataforma como
servicio, en la que se incluye el almacenamiento. Su ratio de
crecimiento estará cercano al 30% anual.
Estos datos de crecimiento conllevan que cada vez sea más común el
almacenamiento en la nube y que haya más competencia, por lo que, como
usuarios, cada vez tendremos una mayor y variada oferta de soluciones de
almacenamiento en la nube que vendrán acompañadas de servicios de valor
añadido.
0 comentarios:
Publicar un comentario