Durante los últimos años hemos experimentado cambios muy importantes en el mundillo tecnológico. Los mismos han tenido un fuerte impacto en muchos frentes, pero entre ellos debemos destacar especialmente uno de ellos, la forma en que interactuamos y nos relacionamos con otras personas.
En este sentido las redes sociales han jugado un papel clave y parece que la próxima revolución vendrá de la mano de la realidad virtual, tecnología que ha traído sistemas que podrían darnos acceso a nuevas formas de relacionarnos con otras personas.
Dicha tecnología abre un nuevo mundo de posibilidades pero también plantea dudas muy importantes y que podemos resumir en una pregunta simple y concisa, ¿es la realidad virtual la plataforma social más asocial?
La respuesta es clara y simple, en su forma actual sí, sólo tenemos que ver lo que implica el uso de un kit completo de realidad virtual y el grado de aislamiento que se consigue frente al exterior, ya que nos aleja del entorno y de las personas a nuestro alrededor.
Un kit de realidad virtual prácticamente “bloquea” a las personas y a todo lo que tenemos alrededor, algo que unido a las experiencias que podría ser capaz de ofrecer con los complementos y accesorios correspondientes nos permite intuir de forma clara el peligro que supondrían si se utilizan sin un mínimo de sentido común.
La interacción humana real podría acabar siendo algo prescindible para muchos, que preferirían aislarse en su mundo virtual, una historia que nos han contado muchas veces en narraciones de ciencia ficción, pero que como vemos podría acabar convirtiéndose en realidad.
Sí, la realidad virtual es impresionante y está llena de posibilidades, pero nos deja otra pregunta, ¿puede la realidad virtual ser social de verdad? Sin duda, puede serlo si se implementa de la manera correcta, pero eso es algo que todavía no hemos conseguido.
Es un tema muy interesante, sin duda, así que os invito a opinar en los comentarios.